Nuestro cerebro se va modificando a lo largo de la
vida. Las neuronas pueden crear nuevas conexiones e incluso pueden formarse
nuevas neuronas. Un mayor número de conexiones implica una mayor reserva
cognitiva, lo que aumenta la resistencia al deterioro por la edad y previene
enfermedades neurológicas.
Existen diversos factores de protección en la
mediana edad que pueden ayudar a mantener la reserva cognitiva en el adulto
mayor; entre ellos:
* La estimulación intelectual,
* Una dieta saludable,
* La reducción del estrés,
* La práctica de actividad física,
* Control de factores de riesgo vascular,
* una vida social activa.
Cuanto más rica sea nuestra vida y cuantas más
experiencias distintas tengamos, más posibilidades existen de que alcancemos la
etapa de adultos mayores con un cerebro sano. A MÁS ESTIMULACIÓN, MÁS RESISTENCIA. En contrapartida, a más
rutina, más perjuicio para el cerebro.
POR QUÉ VIAJAR ES BUENO PARA EL CEREBRO?
Está demostrado científicamente que viajar
contribuye a la felicidad y disminuye el estrés, acumula emociones positivas
que fortalecen las redes neuronales.
También, cuando viajamos caminamos más, hacemos
excursiones o estamos más tiempo practicando algún deporte; nos dedicamos a la
lectura, a actividades culturales y en grupo.
Si el destino es un lugar desconocido, esto obliga
al cerebro a estar en continuo proceso
de solución de problemas y superación de desafíos; viajar requiere aprender y
memorizar todo lo extraño hasta que resulte habitual y conocido como aprender
el nombre de las calles, hacer un mapa cerebral o comunicarse en otro idioma.
ENTRENAR EL CEREBRO
MEDIANTE LA NOVEDAD, LA VaRIEDAD, Y EL DESAFÍO, ES UNA BUENA MEDIDA PARA
ENFRENTAR AL INEXORABLE PASO EL TIEMPO. VIAJAR CUMPLE CON LAS TRES PREMISAS.
Gentileza
revista Por nuestra Salud, Febrero 2017.